WikiLeaks publica una decena de cables de EE.UU. relacionados con la política de Israel hacia Gaza, Palestina y Hamás fechados desde los años 1980, cuando fue fundada la organización islamista, hasta 2008
For articles in English on these documents see:
Telesur, Wikileaks Reveals Israeli Strategies Against Gaza
Haaretz, WikiLeaks: Israel aimed to keep Gaza economy on brink of collapse
Wikileaks, The Israel Cables: Gaza is ‘Hopeless for Now’
Global Research, Israel Speaks: “We Purposefully Attack Civilians… Because They Deserve It”
DEBILITAR LA ECONOMÍA DE GAZA
“Las autoridades israelíes han confirmado a funcionarios de la Embajada en múltiples ocasiones que tienen intención de mantener la economía de Gaza funcionando al nivel más bajo posible y compatible con evitar una crisis humanitaria”, reza un documento secreto de noviembre de 2008.
El Consejo de Seguridad Nacional de Israel trata de controlar la cantidad de dinero que entra en Gaza cada mes. Los interlocutores de las fuentes estadounidenses explicaron que el NSC no permitirá ninguna transferencia a gran escala de los activos de los bancos con sede en Ramallah a sus sucursales en Gaza.
“El NSC se rige por el principio de que Gaza debe recibir dinero suficiente para cubrir las necesidades básicas de la población, pero no está interesado en devolver la economía de Gaza a un estado normal de comercio y negocios”, reza el documento, que es citado por Wikileaks.
¿ISRAEL, DETRÁS DE LA CREACIÓN DE HAMÁS?
Otro texto se hace eco de los rumores de 1988: “Mucha gente de Cisjordania cree que Israel apoya activamente a Hamás en un esfuerzo por dividir a los palestinos y debilitar la Intifada. Señalan al hecho de que operativos de Hamás actúan con valentía, distribuyendo sus folletos”. Además, se menciona que los líderes fundamentalistas regalaban entrevistas a las publicaciones israelíes.
“A pesar de que las fuerzas israelíes realmente hacen la vista gorda a las actividades de Hamás, creemos que no hay pruebas suficientes para concluir que Israel ofrece apoyo activo”, resume el autor de este informe de 1988, Philip Wilcox, entonces consejero general de EE.UU. en Jerusalén.
ATAQUES CONTRA LAS INSTALACIONES DE LA ONU
Otro documento confidencial, en este caso de 2009, cita una carta oficial del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, donde confirma que siete de los nueves accidentes con las instalaciones de la ONU en Gaza “fueron causados por las acciones militares de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF por sus siglas en ingles)” y que “las IDF violaron la inviolabilidad e inmunidad de instalaciones de la ONU”. “Las IDF no tomaron precauciones suficientes para cumplir con sus responsabilidades para proteger la propiedad de las Naciones Unidas y su personal, así como de los civiles que se refugiaban allí”, subrayan los autores de este informe.
Asimismo señalan que los expertos de la ONU, citados por Ban Ki-moon, reconocieron que el Gobierno israelí es responsable de las muertes, lesiones y daños físicos que ocurrieron en esos siete casos. El coste de la reparación de los daños se estimó en 11 millones de dólares.
SEGUNDA GUERRA DE LÍBANO
En relación a la Guerra del Líbano de 2006, los autores del informe de la Embajada de EE.UU. en Tel Aviv citan una entrevista del comandante Gadi Eisenkot en la que describía la situación de tensión existente a lo largo de la frontera norte de Israel.
Eisenkot advertía entonces de que cualquier respuesta israelí al conflicto se parecería a lo que ocurrió en el barrio Dahiya de Beirut –destruido en 2006–, es decir, Israel usaría la fuerza desproporcionada contra cualquier pueblo que le atacara “causando gran daño y destrucción”. Eisenkot lo dejaba muy claro: no se trataba de una mera recomendación israelí, sino de un plan ya aprobado. Desde la perspectiva de Tel Aviv, en casos como el de Dahiya no podría hablarse de “localidades, sino de bases militares”.